lunes, 31 de diciembre de 2012

Tragicómico

No hay forma de explicar la salvajada
La presión no encuentra destino sin destinado
Se favorecen algunos corazones
que no invocan respuestas, solo resguardo

Más allá de callarse
el precio lo paga el que habla
terreno invadido por sonámbulos
no pierden tiempo en despertarse

Favores en la intimidad
sostenemos la mano del guardián
penas deambulan por el hall central
pero cada una tiene habitación

Especulan con el final nuclear
el kamikaze civilizado esta
la tragedia no solo es griega
hace rato se hizo mundial

martes, 25 de diciembre de 2012

Cómo ser un gran Escritor (Charles Bukowsky)



tienes que cojerte a muchas mujeres
bellas mujeres,
y escribir unos pocos poemas de amor decentes
y no te preocupes por la edad
y los nuevos talentos.
Sólo toma más cerveza, más y más cerveza.
Anda al hipódromo por lo menos una vez
a la semana
y gana
si es posible.
aprender a ganar es difícil,
cualquier pendejo puede ser un buen perdedor.
y no olvides tu Brahms,
tu Bach y tu
cerveza.
no te exijas.
duerme hasta el mediodía.
evita las tarjetas de crédito
o pagar cualquier cosa en término.
acuérdate de que no hay un pedazo de culo
en este mundo que valga más de 50 dólares
(en 1977).
y si tienes capacidad de amar
ámate a ti mismo primero
pero siempre sé consciente de la posibilidad de
la total derrota
ya sea por buenas o malas razones.
un sabor temprano de la muerte no es necesariamente
una mala cosa.
quédate afuera de las iglesias y los bares y los museos
y como las arañas, sé
paciente,
el tiempo es la cruz de todos.
más
el exilio
la derrota
la traición
toda esa basura.
quédate con la cerveza,
la cerveza es continua sangre.
una amante continua.
agarra una buena máquina de escribir
y mientras los pasos van y vienen
más allá de tu ventana
dale duro a esa cosa,
dale duro.
haz de eso una pelea de peso pesado.
haz como el toro en la primer embestida.
y recuerda a los perros viejos,
que pelearon tan bien:
Hemingway, Celine, Dostoievski, Hamsun.
si crees que no se volvieron locos en habitaciones minúsculas
como te está pasando a ti ahora,
sin mujeres
sin comida
sin esperanza...
entonces no estás listo
toma más cerveza.
hay tiempo.
y si no hay,
está bien
igual.

Juan Yeite (un gran numero)




La tarde era siempre un momento de reflexión para Luder. Andaba, siempre, atormentado por los embates que afrontaba durante todo el día. Su trabajo le demandaba un gran esfuerzo mental. Él se dedicaba a representar artistas de la música, sin importarle el género al cual se dedicaran. Todos los días de acá para allá ubicando a sus clientes en diferentes eventos o en distintas radios, todo pasaba por él, hasta en lo menos pensado siempre tenía injerencia. Su vida eran días de éxito continuo porque a sus artistas les iba muy bien, por lo tanto su economía se ensanchaba a pasos agigantados. En este último tiempo había adquirido una nueva casa para ponerla en alquiler, sus inversiones se incrementaban favorablemente lo cual permitía que sus clientes también reciban una buen parte por sus trabajos.
Uno de los artistas que representaba era su favorito, Juan Yeite, era el que más le había hecho ganar en este tiempo, pero siempre todo podía variar según el movimiento de sus números. Hoy era Fausto pepe mañana era Dominguito, en ese sentido sus sentimientos no eran estancos, iban rotando al ritmo de sus finanzas. Siempre que iba a un bar y tomaba un poco de más, tenía la costumbre de contar como habían sido sus inicios y todo el tiempo estaba recordando que él había sido pobre desde muy chico. Primero se sumergió en el mundo de la música como artista y como nunca pudo triunfar con lo  que hacía, decidió jugársela por su carrera actual “manager”.
Juan Yeite era el que más eventos tenia por noche, de hecho desde hacia tiempo era el más solicitado de su cartera de clientes. Ahora ustedes se preguntaran por qué tanta insistencia para con Yeite, bueno es que él era un artista que se dedicaba a batirse a duelos de guitarras con cualquiera que se lo propusiera. Yeite comenzó su carrera en esto, a raíz de una película, en donde los protagonistas concursaban por ver quién era el guitarman, esta película era enseñada en todas las peñas o circuitos de guitarristas que anhelaban ser los más virtuosos con su instrumento. Desde el momento en que él tuvo la oportunidad de ver esa película, le dio un giro particular a su estilo de vida, es decir, primero comenzó cambiándose el apellido porque su nombre biológico era Juan Cora y se lo cambió por Juan Yeite[1], después comenzó a preparar coreografías escénicas para sus shows y luego hizo un curso a distancia sobre poses en el rock. Tanto empeñó su tiempo para afinar su performance que esto le genero una mayor convocatoria a sus eventos e hizo que Luder se empezara a interesar más por él, dejando sin prioridad a todo el resto de su clientela. Fue tal su fascinación para con este artista, que había cambiado la foto del porta retrato que tenia de su mujer por la de Yeite. Esto le generaba algunas discusiones con su pareja pero se excusaba diciéndole que gracias a él habían podido hacer todo lo que hicieron, durante estos años.
        



[1] Yeite: En la jerga de los músicos de rock y sobre todo en los guitarristas, es el significado de toda clase de artilugios (provocadoras de fascinación dionisiaca o esplendor)  que se hagan con la guitarra durante un espectáculo.

Críticos pixelados




La causa se encauza y pierde razón de ser por fenómenos que ningún transeúnte me sabe explicar, pero que igual se adhiere sin poner objeción a todo lo que ve. Seguimos viviendo la época de hablar por hablar y no dudar. Lo más sencillo es estar sentado frente a un televisor o repasar un poco los diarios matutinos de los fines de semana y decir: “este país está lleno de negros de mierda que lo único que saben hacer es vaguear”. Entonces me digo que encubiertamente se siguen y cada vez más, pergeñando discursos fachistoides que no van a ningún lado, tan solo a seguir mostrando perfiles retrógrados y penosos.
Realmente no sé cuantos hechos históricos más hacen falta para que la sociedad de un giro discursivo e ideológico, ya tendría que ir acabándose la derecha por ignorancia y darse cuenta lo contraproducente que es la no critica, porque a la larga seguimos sin recordar casos como los de Kosteki y Santillan o Fuentealba, no podemos olvidar hechos como estos porque fueron a causa de brutales represiones. El ensañamiento contra una idea que lo único que intenta es el cambio y la igualdad dice mucho de esa persona, por lo tanto tenemos que saber que los fachoargentinos cada vez son más.

Ejemplos a grandes rasgos:
 A principios del siglo XX, la persecución estaba muy marcada en atrapar y sacar del país a los anarquistas y extranjeros que eran considerados una amenaza para la “armonía nacional”. Una de las grandes leyes que marcó esta parte de la historia es la conocida ley 4144 (ley de residencia) que habilitaba a las autoridades del momento a sacar del país a todo aquel que se interpusiera a la paz nacional. Esta supuesta paz nacional de la cual se hablaba eran las de los gobiernos de facto, primero encabezado por José Feliz Uriburu y después por Justo. Pero la historia argentina todavía tiene más para contarnos y dejarnos en claro cuáles fueron las ideologías predominantes en cada época. Entonces ahora vamos un poco más para atrás y nos encontramos en 1880 con los principios de un fascismo criollo que iba en avanzada y aquí estamos hablando de la famosa campaña al desierto que se cargó a los mal llamados indios de cultura mapuche y tehuelche, para ejercer el dominio de esas tierras, que hasta el momento eran pertenencia natural de los aborígenes.
Violencia y más violencia que nos demuestra cómo se fue y se va construyendo la historia Argentina, que está plagada de hechos sangrientos y todo supuestamente en honor al progreso de la nación. Trayendo un poco a colación a Marx podemos seguir su análisis diciendo sus palabras, las cuales decían: “El capitalismo fue escrito con sangre”, a lo que yo agregaría tomando un termino de él, y con plusvalía. La cultura es un terreno difícil de desandar y está claro que es una lucha por el sentido del mundo, la batalla esta puesta a través de las ideas y me parece propicio no callar nunca a las palabras.
A modo de cierre, a continuación voy a transcribir una prosa que me gusta mucho, que pertenece a un gran escritor, llamado Eduardo Galeano:

El miedo

Una mañana, nos regalaron un conejo de Indias.
Llegó a casa enjaulado. Al mediodía, le abrí la puerta de la jaula.
Volví a casa al anochecer y lo encontré tal como lo había dejado: jaula adentro, pegado a los barrotes, temblando del susto a la libertad    

lunes, 24 de diciembre de 2012

La navidad de algunos

Todavia recuerdo algunas expresiones que tuve de niño, cuando me decian que vaya a mi cuarto a buscar cualquier cosa, para poder darle paso a papa noel y a su bolsa de regalos que venia acarriando, no se desde donde. Por dentro, en la oscuridad de mi habitacion, entendia que ya era la hora de que bajasen esos renos que el señor vestido de rojo, cagaba a latigazos para llegar a tiempo a todas las casas que tenian a los niños, como yo, escondidos en sus habitaciones. Entonces despues de unos cuantos minutos se escuchaba una voz de fondo que decia: "Listo, ya podes salir". Tal es asi que de la emocion, con la cual salia, me chocaba desde sillas hasta a mi abuela que cargaba con la bandeja de los vasos y platos sucios. Cuando llegaba a ese arbolito de navidad, que se arma desde, mas o menos, un 8 de diciembre, me encontraba con una pila de regalos tales como; calzoncillos, medias, etc. Ah, y la cara de mi tio, diciendome: "te gusta, pibe" ¡Fabuloso!
A medida que fue pasando el tiempo, uno se viene mas grande y empieza a comprender un poco mas del panzon barbudo. Es decir, por un lado tenemos la magia de Coca Cola para con esta tradicion y por el otro, a los consumidores del plan magico. Despues, otra de las cosas que componen la velada, son las parafernalias que se arman alrededor de una mesa. De copa en copa, los "te quiero" que se dicen, aumentan la frecuencia. Las palmadas de espalda, casi que sorpresivamente, se convierten en una expresion, de a un segundo por palabra. Increiblemente, la family esta mas unida que nunca. La mesa se rebalsa de platos sabrosos y de bebidas incomprables. Y asi empieza la obtentacion de ver quien trajo lo mas caro.
Seguiendo con la misma performance, esto se tralada al post brindis. Cuando llega la juntada con los noctambulos. Las chicas con todo su placard encima, desfilan por las calles en busca de un trago de algunas de esas portentosas y esquematicas botellas, que se presumen junto con algun descapotable o algo asi. Luego, se le da paso a una borrachera que huele bien y junto a ello, a un viaje en un carro que luce un aspecto poco visto por estas amantes del asiento.
Pues, esto concluye cuando llega la hora de acostarse y la cabeza, da vuelta como el pesado ventilador que cuelga del techo.
Y asi seguimos festejando...
   

jueves, 20 de diciembre de 2012

La profecía ma...

Y si pensamos que el mundo se acaba por una profecía, sería bueno no dormirse para que no nos sorprenda el abismo, con los ojos cerrados. Quizás prenda una vela y en el medio de la noche como antesala ponga una canción que tenga muchos acordes. Tomaré, también, un buen trago de la porquería más rica del planeta: Coca cola. Y antes de que la tierra se abra de par en par, me tirare del balcón. Cayendo hacía el vació fumaré un habano cubano, que me obsequió una de mis tías.
Igual, antes de todo eso; ella estará acurrucada en la esquina de la habitación rezando a todos los santos posibles, mientras ve por la ventana que el cielo esta comenzando a enrojecer. Me dirá que la furia Maya, ya esta haciendo su trabajo, entonces me abrazará con algunas lagrimas discurriendo por sus mejillas y dirá: Te Amo. Para ese entonces trataré de no dar el brazo a torcer para no quebrarme en un llanto inacabable. Pondré una película de cine negro y después de un arduo día, el sueño me vencerá...

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Misivas (con ismos)

Planeando en palabras que no dejan de suspenderse cuando se posan en un papel. Pudiendo ser un bollo amorfo sin consistencia argumental, sigo insistiendo, igual, en su fuerza y movimiento.
El aire, a veces, no es suficiente para absorber la libertad en sus máximas. En algunas situaciones se precisan acciones combativas que permitan patear el tablero. Nuestro espíritu se predispone a situaciones fraudulentas para no fermentarse. Nos volvemos unos tibios, calculadores; que a fuerza de saber arrastrarnos detrás de toda la bola maloliente predispuesta por el controlador, no nos volamos la cabeza. Todavía quedan certezas de que la vestimenta, el cholulismo y el fraternalismo promiscuo, nos de felicidad.

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Silencio en todos los alrededores. En el pueblo ha muerto: Dignidad.
Nadie dice nada...
Dicen que es mejor venerar a la pavada tetona
no habla, sonríe a todos,
se deja tocar el culo
y desea los venerables sables huecos
Chillones ¡vociferando! Que la mierda tiene buen olor    

sábado, 8 de diciembre de 2012

1

Alejarse de lo impune, de la vida
serena a la muerte. Su amante
¡ Éxtasis! la plenitud quiere fluir
La moral: cuerpo y autoridad

Una disputa por el goce
con la salvajada maquinaria
¿es posible una ausencia total?
La miel esta en su colmena

El aguijón tiene varias caras
Cuidamos el filo del que nos gobierna
Perdurar en lo llano. Poco arriesgado
Desgarremos nuestra piel

Follar sin pedir explicación
hacerse de las prosas más candentes
Beber el vino hasta la ebriedad
Dejar de ser un condenado 

jueves, 6 de diciembre de 2012

Los artistas del subte



Por el pasillo, gritos a la muchacha de pollera corta que corre para salir de la boca del lobo. Los calenturientos, que pedían la presa, eran dos imberbes que a fuerza de querer tapar su erección, la tela finita de los pantalones no se lo permitía. Mientras tanto arriba del subte dos artistas deleitaban con sonidos de bombo legüero y guitarra criolla. Se había hecho más largo que lo habitual el viaje y tenía que llegar a la presentación de la novela de mi amigo. El fastidio comenzaba a hacerse presente - no hay nada más perturbador, que tener ganas de llegar a algún lado y que el viaje se una dificultad - y el calor que no cesaba de pronunciarse por mi frente. Las mangas ya no podían más de la humedad. Una mujer que estaba sentada enfrente mio, miraba su reloj con una frecuencia de tres veces por segundo. El subte estaba detenido a mitad de camino por problemas técnicos y el mal humor se había hecho generalizado. Esta mujer que venía enfrentada a mi, seguía mirando su reloj y ahora había agregado la acción de meter y sacar la mano de su cartera de una forma casi neurótica. Me empezó a llamar la atención lo que estaba haciendo, debido a que mientras buscaba no se que cosa en su bolso, miraba para todos lados como atemorizada por algo. Sin pensarlo me acerque para intentar saber si estaba bien.
- Perdón por mi atrevimiento, pero la noto muy pálida ¿pasa algo? - pregunté con algo de vergüenza
- Primero, no me trates de Ud y segundo, si no te corres en dos segundos de al lado mio, vas a estar en problemas, pendejo - dijo sin ningún filtro
Quedé un poco aturdido por la respuesta pero no pude no querer saber porque había dicho eso.
- Tranquila, solo quería saber si te sentías mal. No creas que esto es un intento de seducción o algo por el estilo - dije con una voz más firme.
- ¡Pendejo! ¡No escuchaste lo que te dije! Salí de acá porque te van a boletear y tenes cara de bueno. Dale raja para otro vagón antes de que sea tarde.
No quise levantar ninguna sospecha de que algo raro estaba sucediendo porque eramos muchos en el subte y podía suceder una catástrofe, para colmo todavía no estaba solucionado el inconveniente técnico. Ya llevábamos más de veinte minutos ahí dentro. Sin hacer ningún bullicio fui para el vagón de al lado, que estaba más repleto, todavía.
Por suerte, para todos los que estábamos a la espera de la solución para continuar con el viaje, por los parlantes anunciaron que ya estaba arreglado el desperfecto y continuamos con la marcha. La transpiración que me acompañaba, para ese entonces, era como si recién me hubiese dado una ducha de media hora. Al descender del subte, la mujer de cara pálida me acompañó con la mirada hasta que me metí en la boca que salía a Av. Corrientes. Caminando con la imagen de esta mujer en la cabeza, se me dispararon varios desencadenantes para esa pobre gente que todavía continuaba viajando con ella. Una posibilidad es que sea una fanática kamikase y haya decidido hacer una autodestrucción, inmolándose y así llevarse un par de tipos que no piensen como ella quisiera. Segundo, podría ser que estuviera preparando una coartada con otros de los pasajeros para robarse todo. Tercero, que estuviera viajando amenazada por alguno de los pasajeros y cuarto, podría ser que estuviera al lado su marido, el cual le haya dicho que finja sentirse mal para ver cuál es la reacción que tiene ella cuando alguien hace algo gentil por su humanidad.
El paso previo a llegar a la presentación que se hacía en la casa de la lectura, no fue de los mejores pero se podría titular como: Bastante aventurero. Traté de no pensar más en la mujer porque no iba a poder disfrutar de la lectura que tenía que escuchar y esto sería un problema. Seguramente mi amigo vaya a preguntarme alguna opinión al respecto y sabiendo su hedonismo para con sus obras no podría contestarle: “¡No sé! Tengo la cabeza en una loca del subte”. Cuando ingresé a este lugar encontré gente con aires de barroquismo, reclamantes de una elite cultural que los envuelva. Pura charlatanería de Kafka y Nietzsche. Es decir, un momento propicio para entrar escuchando una canción de Ignacio Copani. La paquetería francesa que engalanaba la noche, tampoco permitía un Washington Cucurto. Al escuchar que un micrófono estaba siendo probado, me acerque hasta el salón. Todos escucharon atentamente la lectura. Los lentes culo de botella aplaudían cada gesto de humor académico que este hacía de forma irónica. Una ceremonia donde no estaba sentado ningún rufián (ahuyenta burgueses). El evento culminó bastante rápido, así que espere a que mi amigo saliera para felicitarlo e ir a saciar nuestras gargantas con una cerveza en el bolichito que estaba a unas cuadras. Se demoro un poco en salir porque unas psicolibertarias le interrumpieron la salida para hablarle de lo bueno y lo fascinadas que habían quedado al leer su novela. Se deshizo de ellas con dos palabras difíciles y por fin llego mi turno. Nos estrechamos en un abrazo y un cruce de labios, por el apuro al saludarnos. Al llegar al bar, por supuesto, nos sentamos y no pude no contarle lo que había vivido en el subte, así que pedimos la cerveza y mientras esperábamos, arranque…

-Tengo que contarte algo impresionante, que me paso mientras venía para acá.
- Uh, ya sé ¿A qué mina te levantaste?
- puf…eso hubiese sido lo mejor
- Eh…dale larga ¿qué te paso? – dijo con pocas esperanzas de que sea algo que rajara la tierra.
- Una tipa que viajaba conmigo estaba muy pálida y para colmo el subte estaba detenido a mitad de camino por problemas técnicos…
- ¿Y qué hiciste? ¿Eso es lo tremendo?
- ¡Déjame terminar, entonces! Me acerque para ver si estaba bien y me dijo que me alejara de su lado porque iba a ser boleta.
- ¿Qué?...no entiendo nada…
- Y yo menos que vos. Date cuenta que esta mina algo estaba por hacer ¡Tenía una cara de demente terrible!
Quedamos en silencio por un rato, mirando por la ventana y sorbiendo la espuma de la cerveza. Veinte minutos después, mi amigo tomó su último trago e hizo un gesto a la moza de que trajera otra y preguntó:
-¿que habrá pasado con toda esa gente? Tendremos que mirar el noticiero…
Mientras de hacer esa pregunta reflexión, ahora le grito a la moza que prendiera la tele y pusiera el noticiero.
-¿Para que el noticiero? – pregunté riendo
- Y, para saber si pasó algo. Estoy seguro que era una de esas fanáticas…
- Al final te intereso, lo que te dije, eh
- Es que inevitablemente esto me lleva a querer hacerlo literatura. Es buen material para un policial ¿no te parece?
- Pero sabemos una parte de esto, ni siquiera tenemos un desenlace o algo un poco más concreto.
- No importa. Henry miller, te diría: “la realidad está en la calle, todo lo demás es literatura” o algo así…
- ¿Estás seguro que diría eso o estas inventando?
- Un poco y un poco – Dijo y lanzó una carcajada
Para ese entonces la moza había comenzado a subir las sillas a las mesas, en señal de que la cosa no iba a poder durar mucha más. Tomamos rápidamente los últimos sorbos y nos fuimos. A penas pusimos un pie en la calle, las persianas se bajaron de manera automática.
-¡Guau! Parece que se querían ir… - dije risueñamente
Caminando hacia la otra esquina, para poder tomar, nuevamente, el subte, hablamos de algunas mujeres de nuestro pasado y recordamos algunas anécdotas. Cuando llegamos, nos volvimos a abrazar para despedirnos y quedamos en vernos pronto. Bajé por la boca del subte y este tardó muy poco en venir. Tenía que hacer varias paradas, así que como vi un asiento libre lo aproveche. Me desperté exaltado porque pensé que me había pasado, pero no. Faltaba una. Con la vista levantada hice un paneo general para ver quienes me acompañaban en el viaje y me encontré con esta mujer. La mire perturbado y ella me clavo la mirada. Esta vez no decline la vista, la mantuve firme en sus ojos y me acerque.
-¿Qué te pasa? – dije con furia
- ¿Por qué? – contestó sin despeinarse
- Me dijiste que iba a ser boleta si estaba mucho tiempo al lado tuyo ¿no te acordas?
- Ah sí ¿te molesto?
Por un momento pensé en putearla pero su mirada seguía inquietándome como para hacerlo. Así que me quede en silencio y deje de mirarla. Diez minutos después, me toca el hombro y después de un breve silencio, lanza un escupitajo sobre mi cara.
-¿Qué haces idiota? – dije con el semblante todo rojo, casi a punto de estallar.
- Soy punk – dijo a carcajadas
-¡Vos estas demente!... ¡Pedazo de puta!
- Eh, no es para tanto. Es un poco de saliva de mujer.
Ya no sabía qué hacer. Estaba totalmente descolocado, nunca había visto una cosa así. No sabía si hablarle, volverla a putear o irme a otro vagón. Pero mientras decía y pensaba todas estas opciones, esta mujer se paro arriba de uno de los asientos y dijo:
-Damas y caballeros, gracias nuevamente por haberme prestado atención. Para los que no me conocen, hago teatro callejero y le agradezco a los nuevos colaboradores – y señalándome a mí, me guiño el ojo de forma cómplice – que todavía no me matan, pero con sus colaboraciones puedo llevar un plato a casa. Así que esto es todo, voy a pasar la gorra como hago siempre y que tengan buen viaje.
Cuando termino su mini discurso, todos aplaudieron con gran fuerza. En ese momento, pensé: cuando le cuente esto a mi amigo va a ser literatura ¡Que increíble!

jueves, 15 de noviembre de 2012

Despertador eyaculado

No se puede postular nada como un acto duradero. Tengo conocimientos muy limitados del tema, pero lo poco que conocí sobre el asunto no funcionó. Me acuerdo aquella vez que tuve la oportunidad de presenciar un hecho de estas características, fue algo sorprendente para lo que me esperaba de una dama. Incluso ciertos recuerdos, ahora que me pongo a pensar, me lastiman un poco. Igual voy a tratar de ser lo más fiel al contarlo.
Ella de corta edad para lo que conocemos como los tramites o injerto, en una situación poco usual (es decir viajábamos en un avión); levantó la vista del piso y al focalizar mis ojos despertó un desatado correteo de las hormonas, digno de ser contado. Por cierto ¡hacía rato que no vivía algo así!
Los pasajeros del transporte aéreo que nos acogía, ni siquiera daban señales de ser espectadores de lo que había pasado entre ella y yo. No quiero ser obsesivo, pero las miradas no fueron fugaces, sino más bien puedo decir que los minutos se llenaron de eternidad. En el avión nos separaba una distancia considerable, casi que estábamos distanciados por dos asientos, pero esto no fue un impedimento para que pidiera cambiar el asiento con un pasajero que estaba a mi lado y disfrutaba los viajes sentado del lado de la ventana. De verdad esto fue un gesto atípico, ninguna mujer había dado tal salto después de una mirada que le pudiera haber echado en cinco minutos. Sentados ambos con pasillo de por medio, agarró mi brazo y dándome un sacudon me saco del asiento. Nervioso por la situación le consulte que era lo que hacía, no es muy pertinente que en estos transportes la gente ande a los saltos por los pasillos. Sonriendo me miro y jugando con mi temor a las aventuras, fuimos hacia el baño.
- ¿A donde estamos yendo? - pregunté con voz temblorosa
- ¡Uh, cuantas preguntas! ¿Para que queres saber? - Dijo casi burlándose
- Y bueno, ya te dije que todo esto es un poco raro.
- A vos te esta matando el pudor...¿Vas a besarme? - preguntó como apurada
 Con mi pelo enmarañado que se representaba en un espejo dos x dos, me dispuse a besarla fervientemente. Acercándonos plano a plano, tal cual película rosa, mis manos fueron buscando un apoyo en sobre salientes lugares. Nuestros alientos ya se homologaban por una misma pasta de dientes y un sonoro despertador hizo su trabajo, para darle paso a una fuga de sol por la hendija de la persiana que me encontró mojado.

blasfemartir

La nada es más saludable
que el frente de una trinchera
me dicen enfermo por decir de todo
quieren las blasfemas en libertad

Vigilias a la fuente del servidor
de rodillas en la nocturnidad
pidiendo a los santos de su devoción
más piedad en su temor

En el pedestal de la falta de identidad
el crimen atropella la razón
la calma agudizada por un ticket
vacaciones eternas en el mundo de hoy

miércoles, 14 de noviembre de 2012

El problema de Marx es el marxismo


Semiosis de lo ideológico y el poder, denomina un conjunto de significados que se ha ido  construyendo. Lo ideológico es la relación de todo discurso con sus condiciones de producción y tiene poder cuando tiene circulación, es decir tiene que entrar en el entramado de la discursividad social. Para Veron, el orden de lo ideológico y el poder atraviesan a una sociedad, porque remiten a dimensiones de análisis de fenómenos sociales y no a cosas particulares. Decir esto significa, que estas dimensiones pueden leerse en comportamientos sociales tales como: Rituales o la gestualidad. Esto escapa, pues, a lo que propiamente ha denominado el marxismo clásico (critica que abordaremos más adelante) como estructura e infraestructura. Nos dice que es absurdo incluir al cuerpo en esos niveles, por ejemplo.
Esto se manifiesta entonces en cualquier nivel de la comunicación social (Institucional, mediática, etc…) de modo que atraviesa toda la sociedad (donde está la semiosis), puede incorporarse en cualquier materia significante. El poder, en este caso, define una dimensión de toda producción de sentido que circula en una sociedad; confundir la problemática de lo político, por ejemplo, con el poder es un error porque de lo que estamos hablando es de un  tipo de discurso que se caracteriza por su relación con un funcionamiento particular.
Para justificar esto, Veron, va a hablar del obstáculo marxista para el funcionamiento de lo ideológico y el poder. En un momento va a desarrollar como se concibió la ideología históricamente (Fascismo, Stalinismo, etc) y va a decir que esto no es más que una gramática o una familia de gramáticas de producción. La crítica se posa en decir que una ideología no es un reportorio de contenidos, como indica el marxismo, (opiniones, actitudes o gestos) es una gramática de generación de sentido y está marcado por sus condiciones sociales de producción. Retomando la noción de poder, podemos decir que el marxismo pretendió un discurso absoluto “el efecto ideológico” tal como lo hizo la religión y muy bien, deja en claro que no es más que un producto que lleva las huellas de un sistema productivo y solo es inteligible en relación con las reglas sociales de su generación. 

jueves, 25 de octubre de 2012

Oh amada libertad

No me preguntes cual es son las razones de mis tormentos, porque no sabría contestarte oralmente sino que todos mis juicios para con algunas condenas existenciales, quedan debidamente expuestos en la escritura. Esto no se trata de ningún tipo de pronostico sobre nada, solo es lo que aflora cuando comienzan algunas preguntas internas. Las estanterías se debilitan y ya no es lo mismo que ayer vivir, sino que es una tarea con otra dirección.
Saber de que se trata a veces puede resultar un acto de ebullición en nuestro interior, por razones, quizás, poco lógicas. Lo que si puedo comentar a modo, casi, de experiencia es: Cuando pasan estas cosas dentro de uno se empiezan a conocer un poco mejor los caminos hacia la libertad, lo cual no significa que vayamos a alcanzarla pero si a perseguirla con más convicción. A modo de ejemplo con esto que estoy desarrollando, voy a comentar una frase que leí en el afiche de una película en una estación de subte. Decía algo así como: " La utopía no es un punto de llegada sino que es un camino", esto a modo de ejemplo puede servir a lo que estaba hablando antes, porque nos invita a reflexionar sobre que tipo de recorrido es el que queremos hacer nosotros en esta vida.

viernes, 19 de octubre de 2012

bolchevita

Si no se esclarecen las atrocidades
y tu corazón tiende a oscurecer
naufragando tormentos poco usuales
se desvanece la vida y ni cuenta te das

Probamos mil cosas para no aflojar
las noches difíciles de ser normales
planeando un salto de longevidad
preguntarse por qué hace mal

Aceptando todo como nos contaron
no aceptamos que algo puede cambiar
cuestionando cualquier acto novedoso
la juventud (para ellos) siempre sera igual

Lo que no se puede manejar
es una probable causa demencial
resulta ajeno un plan soviético
se que a kennedy lo seguirías matando

sábado, 13 de octubre de 2012

Las obsesiones de Martillo


“De todas las posibilidades que hay para contar una historia, puede que esta sea un desparpajo para su complicidad narrativa.”
Anónimo.

La avenida es ancha y contiene varias casas que se posicionan a lo largo de toda la calle, lo mismo ocurre del lado de enfrente. El pueblo “Péndulo” es minúsculo en diámetro geográfico pero  amplio en calidad de habitantes, se llego a decir que de allí surgían los mayores artistas en hurto a mujeres ajenas. Igualmente esto no está totalmente comprobado, hasta el momento solo se conocieron dos casos en donde se fusiono el ser humano con el buitre[1]. Sea como fuere estos datos son dispersos y no quiero decir una cosa por otra, no quisiera tener problemas con la gente de Péndulo.
Este lugar ofrece varias actividades para sus habitantes, se puede hacer desde deportes hasta bonsái. En épocas de vacaciones se recomienda como uno de los pueblos a conocer; hace poquito me entere que se pudo terminar de construir la casa de turismo, también me entere que hubo festejos por ese motivo y que se produjo una borrachera superadora a la de otros festejos pasados. Se dijo que lo más destacable de esa fiesta fue la orgia que se desato, cuando “el loco martillo” entro al salón con la verga en estado rocoso y provoco tal conmoción (de alegría) que se empomó a la más infante del pueblo provocándole tal placer a esta infanta que ahora trabaja en lo que en una época se llamaba “Prostíbulo[2]”.
“El loco martillo”, es uno de los más problemáticos para algunos vecinos, generalmente más para las vecinas que para los vecinos pero a veces para los dos, no se sabe, según como se levante. Su infancia esta atravesada por los peores recuerdos, ya sea desde su familia hasta sus amigos. Su padre, apodado como “mamoncito” fue uno de los más bastardeados en el pueblo, se dice que su definición sexual se termino de acentuar pasados los cuarenta años (actualmente tiene 64 años), mientras tanto tuvo que vivir atormentado por su indecisión, probando desde enredaderas hasta raudas porongas que enchastraban su rostro, literalmente hablando.
Su madre, desesperada por no encontrarse en condiciones de poder ayudar a su marido, dejo la situación en manos del tiempo. Se dice que esta mujer ya estaba enloqueciendo por no ser cogida, de manera que mientras su marido se decidía, ella fue en busca de una cuenta pendiente. Toda su infancia había deseado revolcarse con el más potentado miembro del barrio, nunca pudo saber su nombre pero si donde vivía.  Una noche, después de haber acostado a su hijo, el ahora “Loco martillo”, decidió ir a cumplir su fantasía. A este niño se le hacía muy difícil dormir, hacia varias noches que no veía a su padre y escuchaba gemir a su madre encerrada en el baño. Para él era todo muy extraño, así que como no podía más con la intriga de no saber qué era lo que pasaba, esa noche siguió a su madre. La mujer se puso un tapado largo y sigilosamente se retiro de su casa, caminó largas cuadras hacia la casa del potentado viril. Algo nerviosa golpeo su puerta y se encontró con un hombre de barba tupida y robusto, mirando hacia ambos lados verificando que no haya sido vista, ingreso rápidamente. El niño del otro lado de la puerta, logro asomarse por una ventana. Tanto busco el niño que se encontró con su madre en un estado de lujuria máxima, desde aquella ventana que no olvidara jamás, fue testigo de la mejor cogida que recibió su madre en toda su vida.
Esta mujer casi babeándose bajo los pantalones de este hombre y se encontró con la dotación viril más humilladora que pueda existir. Tomó esa monstruosidad con sus dos manitos, empezó a chupárselo de forma voraz y este hombre arrancó sus ropas, para luego inclinarla en cuatro patas, arremetiéndola a unos gritos que ya escapaban al placer, la mujer pedía por favor que no se la introduzca toda pero no había caso esta bestia estaba engarzado a ella.
 Esa noche el niño corrió desaforadamente chocándose cualquier cosa que se le interpusiera en medio. Nunca más pudo volver a su casa. Sus amigos al enterarse de su situación comenzaron a burlarse, hasta que se dieron cuenta que la cosa estaba empeorando para él. La mayoría de su adolescencia la vivió en la calle, paso a ser un linyera en el pueblo. De sus padres nunca supo más nada ni tampoco quiso saberlo, su condición de calle  lo excluyó de todo, hasta de coger, las minas no se le acercaban porque estaba sucio.
De todas formas siempre se arreglaba con una buena paja en los baños de las plazas y así lograba reducir su excitación adolescente. Los años fueron pasando para este muchacho y ya no alcanzaba la paja, las minas le representaban un deseo múltiple pero no sabía cómo hacer. Estaba atravesando una de las tantas injusticias que sufre la persona que vive en la calle, se tenía que humillar para conseguir comida y hacer trabajos duros, para lograr pasar las noches bajo un techo. Si quería bañarse tenía que pagar, por lo tanto se le descontaban horas bajo el techo, al principio no lo hacía porque prefería dormir debajo de un techo con el frio pero después su necesidad por una hembra se le fue acrecentando, así que una noche cambio dormir bajo techo por bañarse y comer.
Después de comer la porción que le correspondía por su trabajo, fue en busca de un receptáculo que saciara sus ansias sexuales, caminando varias cuadras por una de las avenidas principales del pueblo sorpresivamente se encontró en uno de los cordones de la calle, un fajo de dinero con todos billetes de cien pesos. Nunca se supo igualmente la cantidad porque el cronista es un poco inexperto, pero calculamos él y yo que habían sido alrededor de cien mil pesos, así que de esta manera parecía ser que la suerte había empezado a visitarlo, tan solo le faltaba la compañía femenina, gran problema gran, ¿no?
Su forma de seducir era poco ortodoxa, casi nunca se le presento una situación de esas características, las pocas veces que estuvo con mujeres las amenazó con algún objeto cortante para que le entregaran su cuerpo. Todo esto era un nuevo desafío en su vida. Su mejor idea para dar comienzo a una noche gloriosa fue sentarse en un bar, al que cualquiera de nosotros nunca podría acceder, a no ser que contáramos con un trabajo de oficina donde nuestras libertades quedarían sosegadas, donde nuestra raza humana se fusionaría con un numero y del cual dependeríamos para el resto de la cosecha, ya que nuestro nombre quedaría ex – nominado de las filas de las jerarquías, de modo que pasaría a llamarme nueve, poseedor del cargo : empleado sin autoridad a decir explícitamente lo que pienso de mi jefe, porque sería echado automáticamente sin goce de ninguna indemnización. Todo esto va a qué mejor no asistir a esos lugares de alto target, mejores charlas se encuentran en los bares donde la bebida más pedida es la cerveza.
Seguimos…Martillo, sentado en un sillón con el mentón bien levantado pidió a la moza que le trajera su mejor wishkie en doble medida y en su mejor postura de ganador observaba las minas que pasaban por la puerta del bar.  Sorbió la bebida casi frunciendo el pellejo, sus primeros sorbos fueron de total rechazo debido a que él nunca había tomado bebidas de tales características. El hombre de bebidas preparadas con escasos artilugios, después de los dos vasos de wishkie se pego una borrachera digna de ser adquirida casi al final de una noche de gran jergón. Igualmente esto no fue un impedimento para su búsqueda de una buena hembra que absorbiera todos sus males sexuales.
Primero antes de acercarse a cualquier mujer, fue al baño porque sus ganas de mear eran de tamaña dimensión y si no lo hacía podría llegar a mearse encima a mitad de cualquier conversación. De regreso a su mesa vio que el sillón que estaba ocupando, lo ocupaba una mujer un poco pintarrajeada de más, que le daba continuadas pitadas a su cigarrillo. Se acerco a la mesa un poco sorprendido y le pregunto a la mujer si necesitaba algo, lo cual esta le contesto:
-Las noches son difíciles para mí, necesito tomar algo y la mejor fórmula es sentarme en la mesa de hombres que están solos, como tú.
-¿y cómo sabes que estoy solo?
-Es muy sencillo, primero tenes cara de no coger hace rato y segundo porque ya vengo observándote desde que pusiste tu culo aquí. Antes de que me sigas indagando, quisiera darte un consejo, la próxima vez que pidas wishkie pide uno de menor valor, tu inexperiencia para tomar te provoco una borrachera tal que tiraste la mitad de esta gran bebida, idiota.
-Si queres compartir la mesa conmigo deja de insultarme, perra barata porque seguramente vas a querer que te coja y lo voy hacer pero sin pagarte un centavo, ¿me oíste?
-Bueno tranquilo, guarda esa hombría para cuando estemos en la cama – dijo la mujer, un poco más apaciguada.
¿Qué haces en este bar, es raro ver tipos como tú, aquí. Te sacaste la lotería y estas presumiendo tu fortuna?
-Algo así, igual no es de tu interés. Estoy aquí porque quiero una buena hembra para coger y siempre supe que aquí hay buenas rameras.
-Puede ser que eso haya sido en una época, ahora podrás apreciarlo tú mismo, hay mujeres que quieren dejar de ser putas porque ya no les divierte ser mal tratadas, golpeadas y violadas por ricachones, que solo buscan demostrar en una reunión su condición de machos. Ellas no quieren ser más las anécdotas de tipos que limpian su mierda con los billetes que les sobran. Quieren que su profesión sea respetada como tal, de hecho ahora se formo el sindicato que las apaña y defiende su condición de obreras de la sexualidad.
-¿qué decis, obreras de la sexualidad. Que pelotudes de socialista es esa?
-Pues claro, obreras de la sexualidad. Ellas ponen el cuerpo todos los días de su vida para que le sea retribuido un dinero por sus servicios, como cualquier trabajo. Por eso claramente les corresponde un sindicato que las respalde, para que sufran en menor medida las injusticias que se dan en su profesión.
No tenes porque sorprenderte, vendemos nuestro cuerpo por un rato en el mercado, por lo tanto queremos garantías.
-Uh, yo pensaba cogerte nada más, por todo lo otro espero que tengan suerte. Yo lo único que te digo que si yo pongo la guita, vos pones tu condición de puta y te vas a explicarle tus pensamientos estúpidos a otro.
La charla fue extensa, parecía que no se concretaría nada para martillo porque sus respuestas enfurecían a la mujer, que aferrada a sus principios no accedería a ir a la cama, si no se respetaba esto como condición fundamental para su trabajo. Toda esta cuestión también lo enojaba a él, solo necesitaba sexo y lo único que estaba consiguiendo era ser oyente de una situación que no le importaba. La chica se paró de la mesa para ir al baño pero Martillo dándole jalones en el brazo no quería que se fuera porque quería concretar. Igual se fue al baño y le dijo que la esperase.
Apoyado en la mesa con un rostro que mostraba aburrimiento, se quedo dormido con medio cuerpo irrumpiendo el restante de la mesa. La seguridad del lugar al ver esto, intentó despertarlo porque no se podía permanecer en el lugar en esas condiciones pero no hubo caso. Lo agarraron de pies y manos y lo sacaron en posición de hamaca paraguaya. Hicieron unos balanceos para darle más impulso a la caída y lo tiraron como bolsa de papas al medio del asfalto. Cuando la chica regreso del baño no lo vio en la mesa pero se encontró con un granulado que tenia la frente sudada.    


[1] Buitre: ave rapaz, que se alimenta de animales muertos. Aquí la definición correcta si se quiere. Esta palabra en la jerga barrial va a tener connotación con una persona, que se dedica a alimentarse de mujeres ajenas.
[2] Otros nombres posibles: puterio, pelotero, etc.

viernes, 12 de octubre de 2012

¿Y las plumas sartreanas?

Préstame tu diario, yo te doy el mio. Veamos cual de los dos es el más revulsivo. Se hace necesario que dejes de aburrir con benévolas intenciones tupidas en estar del otro lado de la mirilla para saber como quedar bien.
Los jueces de la vida provocan con moral, es decir te cercenan las ganas de tener una personalidad. Cuesta creer en los oradores que se hacen llamar progresistas y después la viven y quieren un bonapartismo. Eso, concretamente, es coquetear sin vergüenza con personalidades para ganarse una dama o ser el más buscado.
Los más revoltosos - que por cierto, ya se sabe de que lado están - se quejan desde una extensión que produce letras y nos muestra cantos de sirenas, pero después ¿que pasa con todo eso?... simplemente, nada. Es más cómodo repetir frases hipócritas de referentes capaces en la mentira.
¿ A donde vamos con el lugar común del palos para todos? El porcentaje mayor de las personas que convive con nosotros todos los días, esta a la espera de que vuelvan; "Con los milicos estábamos mejor", dice una por allá y otro de más acá asiente, sin saber donde quedo su personalidad. Ahora resulta que tenemos al hombre de los tiradores como el defensor de la verdad y que esta con los más débiles. Resulta que ahora tenemos un par de tipos que se pasean por la tele como los radicalizados, al punto tal de definirse como alternativas revolucionarias ¡dejemos los chistes para más tarde!
¿ Y las plumas sartreanas? la escritura como herramienta para desnudar injusticias y las alternativas comunicacionales independientes, siguen sin tenerse en cuenta. El periodismo se ha dedicado a hacer publico cuestiones privadas, perdiendo de vista detalles que se logran teniendo un poco de compromiso con lo que vas decir ¿a quien le importa, esposo de quien es tal presidente? no es más importante que nos detallen punto por punto las plataformas políticas que tiene cada uno, en vez de decirnos a donde va a cenar. 

viernes, 5 de octubre de 2012

Chachara

Es una plegaria que tenemos que hacerle al alma, cuando se trata de asuntos donde intervienen los sentimientos. Para algunos cuesta trabajo pedirle permiso a la sensibilidad. No conviene, muchas veces, dejarla pasar porque te irrumpe la automatización y la armonía. Mejor no contestarle a las voces internas que se descarnan por decirte que hay un problema. Si aquel de al lado pega un grito de ayuda, mejor hacerse a un lado. Mira, si el muy puerco te chorea y te arranca un pedazo de propiedad. No, eso es inconcebible. En el mundo de hoy que cada vez progresa más individualmente conviene ponerse un protector en los ojos y pornagrafiar la vida, a cualquier sabandija que te ofrezca placer y cháchara.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Y entonces quien las va a salvar...

El boxeo no parecía ser de su agrado, pero al parecer el otro día me han contado que vio por primera vez una pelea por la televisión. Fascinado estaba el hombre, imitaba cada golpe que lanzaban los combatientes. Al fin de cada round, aprovechaba para darle algún que otro sorbo a la cerveza y agarraba un poco de maní, que por el grosor de sus dedos, muchos de ellos terminaban desparramados en el piso. No se preocupaba por limpiar, en esos casos lo que hacía era gritar: ¡Marta! y su mujer con pocos aires de soportarlo venía preparaba porque ya sabía de que se trataba. Mientras tanto, él seguía disfrutando de la pelea y si terminaba pronto porque había un knock out, rápidamente pasaba a un partido de fútbol. Parecía postrado a los pixeles. La mujer estaba preocupaba, ni siquiera le exigía sexo. Eso sí, lo único que exigía era la cena y la casa en orden, no soportaba que se acumulara tierra. Llevaban varios años de esta forma, muchas de las amigas de la mujer, no entendían como, todavía, no se había separado de esa cosa llamada marido. En esos casos solía contestar que era por amor, pero nadie entendía de que amor hablaba, todos los que conocían de cerca el asunto, sabían que eso más que amor era un zafarrancho con papeles.
Ella, había perdido muchas de sus amistades por defender la relación. Le decían que era una sometida pero nada le importaba, hacía oídos sordos a toda critica. Siempre se justificaba con que nadie la va a querer tanto, como la quiere él. Nadie le creía nada, incluso la miraban con lastima. La han intentado ayudar muchas personas de su cercanía  pero lo sentía como una ofensa. Los vecinos ya se habían quejado varias noches por ruidos y gritos. La gente del consorcio denunció varias veces situaciones de violencia y la policía nunca asistía al lugar del hecho. Una noche, me contó un vecino, esta mujer salio corriendo de la casa con un ojo lastimado y agarrándose la panza. Detrás iba corriéndola el tipo con una botella cortada, gritándole las peores barbaridades. Fue así, entonces, que este vecino ya no aguanto más, se acercó hasta la comisaria y trajo a la policía hasta la casa de este matrimonio. El policía golpeó la puerta, acompañado del vecino, pero no contestaba nadie. Golpeó, nuevamente, con más intensidad hasta que una voz algo enfurecida gritó: ¡Ya va! abrió la puerta este hombre y se encontró al vecino y al policía.
- ¿Que significa todo esto? - preguntó enojado
- Esta persona fue a buscarme a la comisaria, para decirme que de su casa se escuchaban gritos y golpes. Incluso, me dijo que vio a su mujer salir corriendo de la casa, tomándose la panza y con un ojo lastimado - dijo el policía, intimandolo
- Pero, que dice oficial. Acá no paso nada de eso.
- ¿Se encuentra su mujer, señor?
- No, en este momento, no ¿Para que la necesita? - preguntó nervioso
- Quiero hacerle algunas preguntas.
El vecino se fue hasta la casa porque le sonaba el teléfono y le dijo al oficial que lo esperara. Mientras tanto el hombre, aprovecho para hacer pasar al oficial a su casa. Lo hizo sentar en la mesa, le sirvió un trago y le ofreció un dinero. El policía miró el dinero con desdén pero después lo termino agarrando y al terminar su trago, se fue. El hombre lo despidió, diciéndole:
- Si lo ves al vecino ahora cuando te vas, decile que vas a integorrar a mi mujer la semana que viene.      

lunes, 24 de septiembre de 2012

Call center


Desde la silla no se puede oír bien que sucede en la calle. No voy a negar que escucho bocinas de autos pasando muy rápido o gritos  de gente que la pasa mejor que yo. Lo que sí, no sé quien pasa por la vereda. Cuando tengo oportunidad de profundizar en mis pensamientos, suena el teléfono y no me queda más remedio que atender.
-Buenas tardes ¿en qué puedo ayudarlo?
Una voz del otro lado sin saber bien para que llama y a donde, dice:
-Me podes ayudar en muchas cosas; una de ellas, es tener plata.
En ese momento me dije: ¡Esto es una joda!
- ¿Como dijo señor?
-Lo que escuchaste ¡necesito plata!
-Señor, se habrá equivocado; acá no se presta plata, ni se hacen donaciones ¿Qué se le dio por llamar a este número? – dije con pocos aires de continuar la llamada.
- No sé, en realidad agarré la filcar y marqué un número. En este momento tengo un arma conmigo. Era hablar con alguien o lo que usted ya sabe…
No podía entender como a las cuatro de la tarde de un martes, estaba viviendo esto. En la vida, creo, que no me porte tan mal. Es decir, nunca induje a nadie a las drogas, ni al sexo sucio, ni a ninguna de las barbaridades que mi comunidad detesta, etc. Por más que hubiese una broma pesada en todo esto, no podía confiarme de que así sea. A nadie le gustaría enterarse que habló con un tipo que después se pegó un tiro y que lo último que le dijeron en la vida, se lo dijiste vos. Soy un mediocre empleado de un lugar que tiene muchos teléfonos, pizarras y publicidades de productos que no tienen utilidad. Este tipo sí que no sabía dónde estaba llamando, porque de saberlo entendería que era mejor estar fuera de ahí.
De todos modos por más que se lo explicaba no entendía y mis recaudos por las palabras que utilizaba eran enormes. No podía dejar de tener en cuenta que del otro lado había un suicida, con una depresión galopante. Tuve que continuar la conversación con un poco menos de tensión.
-Señor, por favor escúcheme: Le voy a pedir que se tranquilice ¿No hay nadie en su casa?
- No. Estoy solo hace veinte años y tengo muchas deudas. Vamos, présteme unos billetes – dijo insistente.
- Pero buen hombre, ya le dije que no somos prestamistas. Con todo respeto, le pido que busque otro lugar para esto.
- No me da ganas de marcar otra vez, aunque sea hablemos un rato.
Colgué el teléfono, sin contestar nada y me quede un poco persuadido por lo que había pasado. El problema mayor seria si este tipo se mata ¿cómo hacer para vivir sabiendo que no pude hacer nada? Los minutos me agobiaban en pensamientos terribles. El teléfono de esta persona había quedado en la pantalla. Lo llamé sin importarme las repercusiones que esto podría traerme en mi trabajo; sonó varias veces pero del otro lado no contestaba nadie - ¡Este tipo se mato, grité! – igual seguí insistiendo unos minutos más, hasta que una voz con carraspera, dijo:
-Hola ¿Quién es?
- Ah menos mal, sigue ahí – le dije con las pulsaciones a diez mil y tantos.
- Sí, estoy acá. Antes no llegue a atender porque estaba…bah, que tanta explicación ¿Quién habla? – dijo embravecido
- Soy el chico, con el que hablo hace un rato y le dijo que no se hacían préstamos
- Ah sí, no me digas que te arrepentiste ¡bárbaro! Necesito cinco mil pesos.
- No no, espere un momento. Lo llamé para saber si seguía vivo.
Largo una carcajada enorme que duro varios minutos. Parecía abrumado por alguna sustancia.
-Noo, joven. Quedate tranquilo que todavía no me voy a matar. Me faltan muchas cosas para hacer. Por ejemplo: conocer la tumba de Stalin o hacer desaparecer al Partido Justicialista y por ultimo; hasta que el hígado no me diga basta, prefiero vivir. Me quedan muchas cervezas en la heladera.
-Por lo visto su humor es muy bueno, así que no tenemos más que hablar. Que siga bien.
- Espera muchacho, no me vas a prestar dinero. Además, lo último que me falto decirte es que un cáncer en el hígado me está comiendo…
Los auriculares por los que oía a este demente quedaron colgando. Me levanté de la silla, escupí al piso y grité muy alto: ¡Me quiero ir! Para ese entonces mi jefe estaba muy cerca del sector, se acercó y pidió que habláramos en forma privada. Fuimos a su oficina, abrió la puerta e ingresamos con un chirrido de fondo, que atemorizaba.
– Sentate, por favor – me dijo, clavándome los ojos.
Apenas apoye la espalda en el asiento, no me dio tiempo a suspirar…
-Lamento decirte que este fue tu último día de trabajo. Las razones, te preguntaras; no sos el perfil que buscamos. Le estuviste hablando más de media hora a un tipo con depresión y no fuiste capaz de venderle ninguno de estos productos.
-Pero señor usted escuchó como fue la conversación. La llamada ingreso, no la hice yo…
No hubo tiempo para explicaciones, se levantó y  abriendo la puerta, me invito a salir de su oficina. Volví a buscar mis cosas. La pantalla seguía igual que como la había dejado cuando me fui. Anoté el número y salí sin saludar.  

sábado, 22 de septiembre de 2012

Esbirros

Escribir como Dostoievski o Arlt, me voy a la re puta que lo pario. Esas dos plumas que te vuelan el cráneo fueron enseñando que la marginalidad cada vez es más participante de este escenario en donde los pseudo jugados son unos locos bárbaros. El viejo Symns, dijo por ahí que las historias están en los lumpenes que no trabajan y estudian, es decir gente que vive en la calle, borrachos o drogadictos. Los tipos esos que no te caen ni medio porque tienen sexo "promiscuo", que van en busca del placer y que para ese conglomerado de gente que "hace las cosas bien" va a estar mal que cojan sin educación.
Viste que para conocer a la gente tenes que hablar aunque los juicios de valor, hoy más que nunca, están a flor de piel. Es un buen mecanismo de defensa. Te tratan de marciano si no integras los valores conservadores de la moralidad. Digo, todavía hay gente que quiere promover: El cerrarte la boca. Da un poco de tedio que te involucres, integrando al que tenes al lado. Lo mejor seria que algunos no existieran o cagarlos a palos todo el tiempo por irrespetuosos. Viste que te dicen: "Ese pendejo no sabe nada de la vida" a lo que yo le contestaría  Si tu enseñanza va ser de odio y repulsión por el que no cumple ciertos requisitos, mejor prefiero ser un ignorante. A veces no esta demás conversar con gente que no conoces o no tiene tu misma cosmovisión o posición social, es una forma de entender que también ese otro es una persona con intereses y pasiones.
¡Más esbirros! gritan por allá. Déjate de joder, todavía les crees. Algunos quisieran dormir con las autoridades en su cama y otros rezan que por su clase social no les rompan la cabeza y desaparezca del mapa. Las balas son un mecanismo muy practico para eliminar a cierto sector y sobre todo cuando tienen un aval jerarquizador: ¡esta todo legal! ¿quien les va decir algo? Para colmo las tribunas los piden a gritos ¡Son nuestra salvación!
La vida se nos va con el miedo a la muerte a cuestas...
Hay esquemas difícil de poder verlos, porque están muy bien montados. Algunos recurren a las estadísticas para crear opiniones universales. Por ahora triunfa ampliamente: ¡La mano hiperdurisima! y el pedido de más  educación desde sectores, donde se profesa: El consumo abrumador y el existismo rápido, entonces es ahí donde me pregunto ¿De que educación hablan? ¿Institución + éxito?      

CLARIN ZONAL


viernes, 21 de septiembre de 2012

Coito Interruptus

Coito interruptus procrea rebeldes
Debajo del brazo hay carnaval
Esas bocas contaminadas por no cojer
Maldiciendo el Nunca Mas

¡Ay que pena!
La mala educación del precoz
tapas de diarios guionadas
La sangre es su dinero veloz

Charlas muy serias deciden futuros
y la mesa pierde su redondez
Los tipos caminando el salón
mientras afuera corre el sudor

Decime que hacemos con este zaguan
no quedan más tangos, no hay pasión
solo se reivindica la posesión
y las caras no asumen ningún dolor

viernes, 7 de septiembre de 2012

Los diferentes: parte 2


Entrevista a Maria  Rosa (comerciante)

El discurso del entrevistado está construyendo un momento de cambio en su actividad cotidiana desde que tiene su local de comercio y vivienda frente al estadio de Argentinos Juniors. Principalmente habría dos problemas que esta remarcando, uno es su actividad comercial para cuando se disputan los partidos allí y el otro es cuando el equipo de Chacarita va a jugar a ese barrio. Esto claro está, cambio el esquema de la cotidianeidad de los vecinos, porque por ejemplo el comerciante tiene que limitar sus actividades según el día que sea el partido y la hora, para Maria Rosa no es lo mismo si el partido es un día de semana que un fin de semana;
¿Cuándo hay partido abre el negocio?
-Antes si porque vallaban de otra manera. La gente podía comprar. Ahora generalmente no. Si es día de semana y es dentro del horario que tengo abierto sí. Pero sábado y domingo no.
Esta puesta del entrevistado indicaría que la seguridad fue variando hasta disminuir a lo que relataba anteriormente, es decir que cuando ella indica “la gente podía comprar”, estaría indicando que la seguridad era otra, si antes se podía y ahora no, hubo una transición que hizo que su postura sea la de cerrar porque las condiciones para trabajar no eran las mismas que en otra época, donde también estaba el estadio ya en funcionamiento, pero eran otras las disposiciones.
Otro punto que va a variar para con su seguridad, son las hinchadas que vienen de otros lados, por qué digo esto, porque ese otro lado que el entrevistado indica que es de donde vendrían las hinchadas “visitantes”, estarían tomando el papel de invasores a su tranquilidad por lo aquí también habría un antes y un después en su vida y la de sus vecinos. Es decir ella afirma no haber tenido inconvenientes con las hinchadas que son de otros lados pero sus vecinos, sí;
¿Alguna vez tuvo problemas con las hinchadas?
-No, yo no. Pero hay vecinos por la zona, acá a la vuelta, que les rompieron todo. Parabrisas…hubo piedras en la plaza. Hubo lio también…robaron.
Digo esto porque la entrevistada, va hacer notar que antes de que todo esto del estadio se ponga en funcionamiento, su tranquilidad era otra.
¿Nota algún cambio al respecto del momento en que la cancha estaba siendo construida?
-Sí, la verdad que sí. Estaba mucho más tranquila.
Hasta ahora podemos ir observando que la situación ha cambiado tanto para la entrevistada como para sus vecinos, con respecto a la seguridad de sus vidas. La cercanía a la cancha parece ser una amenaza que hizo que haya que tomar otros recaudos, que quizás antes no se hacían. Por ejemplo la situación de la entrevistada y su comercio, según el día que se dispute el partido, tendrá que acomodar su día laboral.
Pero la amenaza no es solamente la cercanía al estadio, sino también la presencia en el barrio de la hinchada de Chacarita, los cuales serian un paradigma a desentrañar porque era mucho el miedo que repercutía cuando estos tenían que ir allí.
-Chacarita era un desastre, lo peor que le pudo pasar al barrio.
Para la entrevistada esta hinchada ejercía la violencia de un ser no civilizado, digamos fuera de toda racionalidad;
-Por Jonte los indios se la pasaban robando, saqueaban. Los chinos tenían que cerrar porque les sacaban todo. Hay un quiosco acá en San Blas, pasando Gavilán, que le robaron todo a la señora…le mandaron todos adentro y chau. Incluso en el diario salió que acá en el puente tiraron de un colectivo a una mujer y la mataron.
De alguna forma se describe un otro al cual se le tiene miedo caracterizándolo como “indio”, hay para ese nosotros que construye la entrevistada, formas del otro que no se pueden entender, por ejemplo, su violencia o el robo. Es decir que ajenos a toda racionalidad la cual si la estaría teniendo la entrevistada que no roba y no es violenta, utiliza el calificativo “los indios” que de alguna manera indica que se sigue manteniendo ese dualismo que fue parte del siglo xx, ese dualismo que en algún momento hizo mella también en el General Julio A. Roca para justificar su campaña al desierto. Este grupo al que me refiero es el de civilización y barbarie, que muy bien esta detallado en el libro de Sarmiento, Facundo[1].
Para no caer en digresiones, vamos a seguir con ese otro amenazante que describe la entrevistada. Todo indicaría aquí que el hincha de chacarita no es perteneciente a esta cultura civilizada, es un entramado donde se describirían que sus acentos valorativos para con la vida son diferentes. Es decir que la hinchada de chacarita pertenecería a otro grupo étnico, “los grupos étnicos son categorías de adscripción e identificación que son utilizadas por los actores mismos y tienen por tanto, la característica de organizar interacción entre los individuos”[2].
Para ir cerrando, se podría decir que la amenaza a la tranquilidad del barrio esta puesta cuando vienen hinchadas ajenas pero sobre todo y acá hay algo característico, hay una hinchada que no cumple con los límites de la civilización y por eso sería la que impondría más miedo cuando estos tienen que venir a disputar un partido a la cancha de Argentinos Juniors, estoy hablando de la hinchada de chacarita.


[1] Sarmiento, Domingo Faustino, Facundo, Centro Editor de América Latina.
[2] Barh, Fredrik, Los grupos étnicos y sus fronteras – Introducción. México, Fondo de Cultura Económica, 1976.

Los diferentes en boca de "la gente"

Entrevista a Norma (encargada)

La entrevistada va empezar indicando la diferencia entre los chicos que estudian y los que no, pone como ejemplo a los entrevistadores, pero también indica que sus hijos son como los entrevistadores, de buena formación. El terreno divide las aguas en un nosotros los formados y los otros los de la calle, es trivial esto porque los de la calle, estaría marcando esta mujer, son los que se drogan, toman alcohol, roban y destruyen lo que la gente de allí mejora.
-En si el barrio es tranqui. Hay problemas como en todos lados. No sé. Ustedes son diferentes. Hay chicos que no estudian y se ve de todo en la calle. Yo tengo hijos como ustedes también, con buena formación. Los de la calle que se interesa por otras cosas tienen otras formaciones. Ustedes me entienden lo que les quiero decir. Mi hijo antes era adolescente y ahora es electrónico, programador de sistemas. Lo traía desde Urquiza acá para que viera al padre. Miren acá. Ni los apliques están tranquilos. Se roban todo. No queda nada. Vos mejoras algo y te lo rompen. Son los que están habitué. Los que chupan acá enfrente, vienen acá drogados.
Aquí se me ocurre luego de este fragmento de entrevista, la posibilidad que existe en la sociedad de hacer una interpretación desde las distintas posiciones de las personas, quiero decir la posibilidad de utilizar el concepto de comunidad imaginada que describe andersonAnderson. Los chicos de la calle existen porque se pueden imaginar, Anderson va a decir de alguna manera cualquier grupo es construido como comunidad imaginada para que exista como grupo.
Siguiendo con esta  línea de diferenciamiento entre grupos, podemos agregar que Norma, va a marcar nuevamente otro dualismo pero esta vez entre la hinchada de chacarita y la de Argentinos junior. Aquí otra vez se hará presente el par que describía Sarmiento en su libro, Facundo, me refiero a Civilización y barbarie;
-La época de chacarita era tremenda. Rompían toda la cuadra. Venia chacarita y directamente todo el barrio estaba en pánico. Nos metíamos todos adentro y no salíamos. Cuando juega Argentinos juniors es muy tranqui y estamos protegidos porque hay doble vallado. Está lleno de policías. El problema es cuando viene la gente de afuera. Rompen todo. No sé por qué. Los de chacarita encima que les prestaban la cancha destrizaban toda la cuadra.
Estas declaraciones me remontan un poco a la época de la inmigración que se dio en el país a principios del siglo xx, también me hace pensar en la figura del anarquismo y su representación amenazante para la identidad nacional y la armonía de la patria. Quiero decir la presencia de un otro pertubador que hace que la gente se atemorice y piense lo peor. En este caso Norma, en sus declaraciones consigna a la hinchada de chacarita como la figura perturbadora que llega al barrio para arrasar con la tranquilidad. Es la amenaza, esta gente que para ella no está dentro de la formación de un ser racional, casi diría como que más que una hinchada esta gente seria un grupo terrorista, para imponer ese temor. Es importante resaltar que la entrevistada describe que cuando juega Argentinos juniors, la zona permanece en tranquilidad, casi que esta describiendo que hay un grupo que pertenece al bien y otro al mal.
“Aquí, barbarie es impunidad, tortura, exclusión, violencia social, económica y estatal…”[1]
Otro detalle importante a destacar es la diferencia que establece la entrevistada, cuando habla del antes y el después que hubo cuando se finalizo el estadio. Primero destaca que cuando el estadio estaba en construcción, la gente lo utilizaba para dormir y quedarse allí, pero remarcaba que la gente que se ponía ahí no eran familias sino drogadictos y ladrones. El cambio para ella se produjo cuando se finalizo el estadio porque a partir de ese momento se podía saber quienes ingresaban, ya no había más posibilidades de utilizarlo como refugio, solo van los que pueden pagar una entrada para ingresar.
-La cancha en si no tendría que haber estado acá. Se hizo después. Cuando estaba la otra cancha no era lo mismo porque no estaba en uso. Ahora lo bueno que tiene es que el gobierno de la ciudad hiciera un colegio. Es un gran progreso. Ahí en la otra cancha había de todo. Venían de la morguera a buscar ahí adentro. No te imaginas. Ni familias eran, todos los desocupados de acá, esos drogadictos que estaban ahí, todos robaban. Venían de todos lados, era un refugio la cancha, muy triste. Es mejor ahora que antes. Ahora sabemos quienes vienen, antes te venían de General paz corriendo con todos los policías…”
En conclusión, Los otros los drogadictos junto con la hinchada de chacarita, despiertan temor hacia la gente que está dentro de sus cabales e intenta hacer algo por sus vidas. Con respecto a lo que comentaba la entrevistada en el párrafo anterior, del cambio que se produjo en el barrio cuando se termino el estadio, lo que más me intriga ahora es saber si realmente saben que gente es la que va.


[1] Baigorria, Osvaldo y Mónica Swarinsky (2009), La máquina de trazar fronteras, en Martini, Stella y Marcelo Pereyra: La irrupción del delito en la vida cotidiana, Buenos Aires, Biblos.